Cal
He preparado jalbegue para muros y techos. Cal viva, agua y a hervir.
Adoro la cal.
Asemeja el yogurt más cremoso o un postre de vainilla, pero no te olvides de usar gafas de protección y guantes de goma.
La cal es incomparable.
Sabías que un muro pintado con cal refleja el doble de luz que un muro blanco pintado con cualquier otra cosa?
Añadiéndole aceite de linaza crudo conseguimos que se adhiera mejor al muro. Antiguamente se usaba sebo.
Añadiéndole cloruro cálcico conseguimos que no manche cuando nos apoyamos en él.
Añadiéndole marmolina hasta conseguir la consistencia deseada conseguimos que no salpique y una mejor cubrición desde el primer brochazo. Y la acústica de la habitación recuerda a la que tendría si hubiéramos pintado una y otra vez durante años.
Me hace ilusión empezar a pintar mi cocina.
Ahora estoy revocando el techo. Uso arcilla que arranco a golpe de azada del suelo del salón. Mi plan es que para cuando acabe de usar tierra en la obra el nivel del suelo del salón sea el preciso.
Hoy luce el sol después de un par de días húmedos de lluvia (con mala cobertura de móvil) y puedo salir a pintar la nueva puerta y la ventana del patio.
Ves preparándote para unas fotos del antes y después de esa sección de muro.
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